“Des­tino, la rela­ción entre Sal­va­dor Dalí y Walt Disney

Sen­ci­lla­mente una obra de arte que ve la luz gra­cias al nieto de Walt Disney; Roy Dis­ney, es revelada al mundo luego que fuera res­catada del sótano de la mega com­pa­ñía del ratón. se trata de Destino, proyecto inconcluso entre Sal­va­dor Dalí y Walt Disney en 1945.

He venido a Holly­wood y me he tro­pe­zado con tres gran­des surrea­lis­tas ame­ri­ca­nos: los herma­nos Marx, Cecil B. DeMi­lle y Walt Dis­ney escri­bía Dalí a su amigo André Bre­ton en 1937.

Ocho años des­pues, cuando éste tra­ba­jaba con Alfred Hit­ch­cock en la adap­ta­ción de The House of Dr. Edwards, Walt Dis­ney con­trata a Sal­va­dor Dalí para la rea­li­za­ción de un tra­bajo jun­tos.

El proyecto en mención sería el corto cine­ma­to­grá­fico deno­mi­nado "Des­tino", el cual esta­ría incluido en una anto­lo­gia lla­mada "Make Mine Music". Este cor­to­me­traje queda sin con­cluir debido a los pro­ble­mas eco­nó­mi­cos de la com­pa­ñia tras la Segunda Gue­rra Mun­dial y a su cárac­ter poco comer­cial del proyecto.

Según los infor­mes de David D’Arcy, Walt Dis­ney lamentó pos­te­rior­mente esa deci­sión. En 2003, tras ser res­ca­tado de los “sota­nos de la Dis­ney”, su sobrino Roy Dis­ney, que ahora dirige la divi­sión de la ani­ma­ción de la com­pa­ñía, res­ta­ble­ce el pro­yecto al con­tar con el guión ori­gi­nal, los “story boards” y el tema musi­cal ori­gi­nal.

Des­tino es una pelí­cula del seis minu­tos diri­gida por Domi­ni­que Mon­frey, “se ins­pira en una melo­día del mexi­cano Armando Domín­guez, que sir­vió a Walt Dis­ney para ima­gi­nar el argu­mento musi­cal del corto.

Par­tiendo de la com­po­si­ción de Domín­guez, con una letra escrita por Ray Gil­bert e interpre­tada por Dora Luz, el pro­duc­tor aspi­raba a la crea­ción de una espe­cie de poema amo­roso audio­vi­sual” des­pro­vista de diá­logo y sin una his­to­ria definida.

Fuente: Rockvertising